Sin apenas darnos cuenta el verano llegó a su fin y ya tenemos con nosotros el frío, preludio del invierno... ¿Qué mejor que meternos entre fogones y cocinar una legumbre?
Ingredientes:
8 placas de lasaña seca
200 g de lentejas rojas
1 cebolla grande
100 gr de champiñones
3 cucharadas de salsa de tomate
Aceite
Sal
Salsa de soja
Pimienta
Para la bechamel:
1/2 l de leche
2 cucharadas de harina
30 g de mantequilla
Sal
Nuez moscada
Elaboración:
Remojar las placas de lasaña en agua caliente.
Picar la cebolla en trocitos pequeños y rehogar la mitad en una cazuela, añadir las lentejas rojas y cubrir con agua. Cocer a fuego muy fuerte al principio, añadir sal. Cuando hierva bajar el fuego y cocinar durante 20 minutos. Añadir agua si es necesario.
En una sartén rehogar el resto de la cebolla. Cuando esté dorada añadir los champiñones en rodajas finas y dejar que todo poche a fuego lento. Agregar el tomate al sofrito y dejar cocer el contenido.
Hacemos la bechamel derritiendo en una sartén la mantequilla, añadimos la harina, removemos con las varillas para que no se formen grumos y adjuntamos la leche poco a poco. Cuando espese echamos la sal y la nuez moscada, removemos y retiramos del fuego.
Precalentar el horno a 200º. Cuando las lentejas estén cocidas le añadimos el sofrito y la salsa de soja, dejamos que dé otro hervor y apagamos.
Montamos la lasaña, para ello colocamos en una fuente honda de horno una capa de las placas, encima un poco de la mezcla de las lentejas y cubrimos con la bechamel. Lo ideal es hacer 2 alturas y terminar con las lentejas y la bechamel. Lo metemos todo en el horno a gratinar 3-5 minutos.
Variantes:Ahora que es época de setas podemos cambiar los champiñones por cualquier tipo de seta, y no os digo ya por hongos...este plato con boletus está de muerte!